Correr los Six Majors es uno de los sueños de todos los runners amateurs. Hace 19 años cuando comencé a trotar nunca me imaginé hasta donde llegaría con esta pasión y hobbie. Sobre todo, donde llegaría con los viajes y con el presupuesto destinado.
Originalmente comencé a correr después de salir de la universidad, porque no me alcanzaba para pagar un gimnasio con el sueldo de mi primer trabajo. Según yo, no necesitaba nada más que unas zapatillas, trotaba todos los días sagradamente por el parque Vespucio desde principio de la Pirámide hasta Escuela Militar ida y vuelta. Esto me permitía mantenerme en “buen estado físico”.
Luego comenzó el bichito ir a una carrera a mirar… no me alcanzaba para la inscripción, pero aprovechaba que cerraban las calles y trotaba. Luego subieron el sueldo, así que comencé a participar de carreras pagadas, muchos 5K, 10K, 21K. Luego cambié de trabajo vinieron más carreras, mejóramos las zapatillas, pero no había pensado en maratón.
Tuve un pequeño accidente, un atropello (Gracias a Dios nada grave), que significó sólo una fractura de metatarso que me obligó a parar y ahí conocí a marido. Me casé y tuve niños, así que el running pasó un poco desapercibido por el temor de la lesión.
Hasta que volvimos fuerte nuevamente en el 2016, en un pequeño grupo de runners con amigos de Huechuraba Procorre, saludos a todos. Ahí volvió la pasión, comenzaron nuevos desafíos, nuevas zapatillas, controles de nutrición, pagar coach, carreras y más.
¿Cómo le traspasaba esta pasión a mi marido que no es runner? No le gusta correr, pero si el deporte en general.
Los niños ¿quién los cuida para entrenar? Las que somos mamás sabemos el cuidado y el tiempo que debemos dedicarle a la maternidad y lo complejo que es compatibilizarlo con los hobbies. Afortunadamente, mi marido comprendió que esta pasión me hace feliz, me hacía estar más relajada, más amable por la vida, cedió y participó, tomando parte de la organización de la casa y los niños, para que pudiera tener tiempo para entrenar. Cosa que debe ser siempre, pero una por un tema cultural tiende a hacerse cargo por completo, grave error. Ahora existen lugares donde podemos recurrir, como guarderías (Lacasajuego) que en mis tiempos de niños chicos no estaba.
Decidí que había llegado el minuto de hacer una maratón. Esto implicó muchas más horas de entrenamiento y mayor participación de mi marido. Al ingresar a un Club como Santiago Runners, uno se impregna de la experiencia de los socios antiguos, quienes en su mayoría ya han corrido los Six Majors y ahí comienza ese bichito nuevamente… y qué pasa si me comienzo a preparar para estos 6 grandes desafíos? Y partimos!!!
¿Cómo convenzo a mi marido que se quede con los niños que ahora quiero salir fuera de Chile a estás maratones por el mundo? Más horas de entrenamiento, más presupuesto…
No tengo una receta perfecta, pero ya después de 4 Majors, algo he aprendido.
El primer punto es involucrarlo al desafío. Que se una y vayamos juntos! Comenzar por mostrarle el lugar, lo importante que es y que también es una buena instancia para hacer turismo y estrechar nuestra relación de pareja. Ya coordinados con quien dejar a los niños, comienza la planificación, el entrenamiento y el ahorro. Esto implica tratar de ponerse con un poquito más, para que sea una experiencia preciosa para mi partner.
Después de 4 Majors, 5 maratones y 6 años ya en Santiago Runners, mi marido si bien no corre, es uno más, participa de las comidas, conoce las anécdotas, sufre con los tiempos y se transforma es un fan. Por eso, la importancia también de estar en un Club familiar que acoge a tu pareja y entiende la relevancia y el rol que juega en la vida en pareja compatibilizar los tiempos.
Es relevante también empatizar con la pareja, nosotros los runners tendemos a ponernos algo repetitivos con los temas y podemos pasar largas horas hablando de ello, debemos tomar consciencia y saber parar un ratito.
Si bien la preparación de un maratón te lleva a ponerte metas desafiantes en la alimentación, los bebestibles y el descanso, cuando llegas a un Major eso ya pasó, hay que relajarse. Para mí es ideal llegar un par de días antes para aclimatarse y darse el tiempo para salir a comer a lugares con comida saludable, sin tanta fiesta, pero también disfrutando. Recomendable ir a lugares turísticos, hagalos en bus, use el metro o tren, para no cansarse. Típicas visitas guiadas que implica bajar y subir del bus y caminar a ver el monumento y listo.
El día previo al maratón reservar cena a las 18-19 horas en algún lugar con pasta y a las 20 ó antes estar acostado, eso no se transa y en la noche claramente su celebración post maratón. Para mí, el día siguiente o el mismo día del maratón lo uso para ir a lugares donde debo caminar, ese ejercicio me sirve para elongar.
En cada lugar que visitamos por los Majors, dejamos espacio para que él busque su lugar especial a visitar y que lo haga feliz también, tenemos que equilibrar. Por ejemplo, en Chicago fuimos a ver un partido de los Chicago Bulls y ahora en Londres 2023 fuimos a Liverpool a conocer el estadio de Anfield.
Recuerda reservar con anticipación.
No tengo la receta perfecta, pero al menos en estos 4 Majors me ha funcionado y sin duda me acompañará en los próximos que me quedan.
Finalmente, no olvido que esto es un hobbie que lo hago para pasarlo bien y adicionalmente nos sirve como un tiempo para fortalecer nuestra relación y conocer lugares increíbles.
Mucha suerte en sus Majors!! Y a regalonear a sus parejas por su compromiso que es parte importante para cumplir el sueño completo.
Pía Gallegos
Directora Santiago Runners
Jueves 27 de abril de 2023