Race Report 70K Merrell Futangue Challenge 2018
Hace algunos meses que el Trail Running ha pasado a ser un deporte amparado por la Federación Atlética de Chile (FEDACHI), esto significa que, ahora Chile puede contar con una selección de atletas que asistan a los campeonatos internacionales representando a nuestro país. Ya no se trata del desempeño individual, sino que de un trabajo en equipo. Esto entendió claramente el primer grupo de corredores clasificados, del cual tuve el privilegio de formar parte en el campeonato sudamericano K42 en Villa La Angostura (Argentina), el pasado noviembre. En él, todos los que conformamos el equipo, corrimos por los senderos del parque Nahuel Huapi entregando todo lo que teníamos, sintiendo la responsabilidad de que los gritos de ánimo tenían el nombre de “Chile” y no el de cada uno. Gracias a ese coraje, trabajo en equipo y al gran talento de todos mis compañeros y compañeras, logramos ser el equipo campeón masculino y el tercero femenino.
Cuesta dimensionar lo importante que es esto, el gran logro que significa ser los mejores de Sudamérica a pesar de ser un equipo que recién nace, habiendo entrenado cada uno con sus propios medios, sin la madurez propia que adquieren los deportes federados a lo largo de los años de aciertos y errores, sin ni siquiera un uniforme de competencia que nos identificara. Fuimos los pioneros abriendo un camino para otros deportistas que vendrán después.
Ahora, con el aprendizaje del K42, el desafío se trata de ir a representar a Chile en los 85k del campeonato mundial de trail running, el próximo 12 de mayo en Penyagolosa, España. Para ello, tal como se hizo en el sudamericano, se realizó una carrera abierta para todos, que permitió clasificar a las 5 mujeres y 5 hombres que primero crucen la línea de meta en el Merrell Futangue Challenge en la distancia de 70K.
Yo, corredora de trail running, triatleta y también trabajadora que se sienta frente a un computador 9 horas al día -al igual que la mayoría de los que quisimos enfrentar el desafío- me propuse entrenar durante meses para llegar en buen estado el día de la competencia clasificatoria. Quiero volver a ser parte del equipo chileno, quiero volver a vivir la extraordinaria experiencia de caminar como delegación chilena por las calles de otra ciudad en otro país. Yo, una chilena común y corriente, que descubrió el deporte recién cuando estaba en la universidad, y que jamás siquiera soñé que podría ser seleccionada chilena, quería correr los 70k del Merrell Futangue Challenge y ganarme la clasificación.
Tan pronto largamos, a las 5am, falló mi linterna, ¿es una mala señal? No, son sólo cosas que pueden ocurrir, como no veía nada tuve que mantenerme cerca del resto de corredores hasta el amanecer, en muchos momentos corrí sólo sintiendo el terreno en mis pies. Los primeros 20k fueron rápidos y con muy poco desnivel, a algunos nos sirvió para entrar en calor para los más de 3.000 metros de ascenso positivo acumulado que nos esperaban. Hasta ese momento, quien no estuvo nunca en el parque Futangue no tenía idea de la belleza que nos espera tan pronto termináramos el eterno ascenso por camino de autos hasta el punto donde largarían más tarde las distancias más cortas.
Logré quedar puntera de las mujeres cerca del kilómetro 23, pero ni siquiera era la mitad de la carrera, así que intento no emocionarme demasiado, quedaba muchísimo aún. Tenía muy claro que las chicas que estaban compitiendo eran excelentes corredoras, incluyendo a la Marlene, que no es buena, sino que simplemente es la mejor. Por lo mismo, no me sorprendió ver que me alcanzara en el km 32, logré mantenerme con ella por algún tiempo, pero después la perdí de vista delante de mi.
Es tercera vez que participo de esta competencia y los senderos de este parque están en mi lista de favoritos, son anchos, de tierra blanda, pocas piedras, abundante vegetación y unos paisajes de belleza extraordinaria. Se puede trotar la mayor parte de las subidas y volar (o creer que vuelas) en las bajadas. Logré conexión absoluta con el entorno y con mi cuerpo, pude sentirme bien y mantener mi ritmo hasta llegar a los mil y algo (¿o quizás mil millones?) de escalones del bellísimo cerro Mayo, donde por primera vez puedes ver a qué distancia de ti están los corredores que van bajando. Vi a los punteros bajando hechos unas bestias, ¡qué lindo espectáculo es verlos bajar casi sin tocar el suelo con los pies!, pienso que tendría que nacer de nuevo para bajar así. Por fin veo a Marlene que no iba lejos delante mío, pero también vi, al comenzar la bajada, que mis respetadas y temidas rivales no estaban a gran distancia detrás mío. A pesar de que aún quedaban casi 20 kilómetros, no lo pienso mucho y decidí darlo todo, bajé lo más rápido que pude y luego cuando la fatiga ya era evidente, tuve que sacar fuerzas de mi mente, porque mis piernas ya no la tenían, para enfrentar la subida a altas cumbres que parecía ser eterna. No sabía si las otras chicas se habían acercado, pero en realidad no era relevante, debía dar mi mejor esfuerzo, dar la vuelta a la laguna Pitreño, conformarme con sólo ver su belleza sin poder detenerme a contemplarla o sacar fotos y luego enfrentar la larga bajada hasta la añorada meta.
Los últimos kilómetros los corrí como si fueran los primeros, con todas mis fuerzas y sabiendo que esta historia ya se estaba terminando de escribir. Cuando llegué en segundo lugar a la meta, me permití emocionarme sin pudor, sólo pensaba en lo importante que era esta carrera para todos los que estábamos ahí compitiendo y todo el esfuerzo que hubo detrás. Sé lo privilegiada que soy al ser uno de los 10 miembros del equipo chileno que irá al mundial en España y, por ello, siento el compromiso de seguir entrenando para llegar en óptimas condiciones.
Quiero felicitar a la organización de esta carrera, que una vez más fue extraordinaria y que con el poco tiempo que tuvieron, dieron las facilidades para que este año se incorpore la distancia 70K clasificatoria. También a todos los valientes atletas que enfrentaron el desafío, independiente del resultado, y en particular a quienes se ganaron la clasificación:
● Emanuel Acuña
● Luis Valle
● Héctor Montecinos
● Emanuel Salinas
● Santiago Margozzini
● Marlene Flores
● Karmina Valenzuela
● Katherine Cañete
● Andrea López
● Cindy Ramírez
Karmina Valenzuela
Seleccionada Nacional de Ultra Trail
Fecha de la carrera: Sábado 10 de febrero de 2018