Race Report – Maratón de Londres 2024
Como más de 55.000 corredores el día domingo salí a correr el que fue mi maratón número 11; después de 16 semanas de un plan de entrenamiento seguido al pie de la letra, ya me sentía finalmente lista para ir a buscar mi anhelada marca y consagrarme “Sub-3 horas”.
El día partió tempranito con el bus que nos llevó a Greenwich Park. A las 8:00 horas ya estábamos esperando la apertura de los corrales para poder encajonar. La espera se hizo larga por el frío y el viento que corría en este parque súper abierto, mi única preocupación era no enfriarme tanto para poder arrancar la carrera con buenas sensaciones.
A las 9:30 am dejé mi bolso en el camión y me vine a encajonar, con tanta multitud, todos apretados y los nervios que ya empezaban a llegar ¡ya no sentía el frío! Apenas me encajoné vi el pacer de sub-3 pasar delante mío y pensé: “¡Amigo! ¡¡¡Hoy te gano!!! así nomás, con la confianza en mí antes de salir.
A las 10:04 horas ya le toca mi oleada salir. Los primeros kilómetros se van a un ritmo controlado y en bajada controlando el reloj, pensando en no quemar inútilmente energía que desde el km 30 en adelante iba a necesitar, sentía que tenía que ser conservadora y no dejar la ansiedad y las ganas de correr me hicieran llevar la primera mitad del maratón a un ritmo que luego no iba a ser capaz mantener.
Era la primera vez que mi familia venía a verme correr y no los quería defraudar, y menos aún a todos mis compañeros de team Cronos que me venían diciendo que yo era la próxima sub-3.
En los primeros 21 kms estaba con una sonrisa en la cara que nadie me la quitaba, quería que mi familia viera lo feliz que soy corriendo y me sentía con una energía tremendamente contagiosa y sobre todo volando, buscaba dentro de tanta multitud por la veredas a la derecha y a la izquierda mi familia, era el efecto de sorpresa, mi hermano me había dicho que iban a estar en 2 puntos de la primera mitad y estaba súper pendiente de verlos, no sabía dónde ni cuándo, pero sabía que en cualquier momento aunque no los viera yo, ellos si me iban a ver y a alentar. Bueno, esto nunca pasó, entre tanta gente que había y yo tan chica dentro del grupo de hombres que me llevaba el ritmo nunca los vi y nunca me vieron.
Un grupito de Cronos me pilla bajando del Tower Bridge kilómetro 20 pegándome un grito que me dio el empujoncito necesario de mitad de carrera. Poco a poco avanzaba la carrera, y entrabamos en la Isla de los perros donde con las calles estrechas, el viento de frente, el frío en las manos, los empujones, los codazos, y las pisoteadas con los otros corredores, me empecé a sentir más en un ring de boxeo que desarrollando mi propia carrera, además del “maltrato físico” que venía sintiendo, mi peor enemiga empezó a manifestarse. Ya mi maratón se venía cuesta arriba, la pelea mental empezó y se llevó con ella toda mi energía matutina cuando recién mi reloj marcaba el kilómetro 26.
Tenía que darle vuelta a esto, no tenía otra opción. Tres kilómetros de lucha conmigo pensando primero en mantener el ritmo y luego en mis Cronianos viéndome, seguramente ya celebrando mi Sub-3, mi coach José Camps a tan temprana hora siguiéndome por la App pensé: “No puedo botarlo todo aquí, no puedo dejar escapar mi momento de gloria, me la entrené toda esta maratón, soñé con este sub-3, con esta llegada de Londres con lágrimas en los ojos, recordé los entrenos satánicos, recordé el sacrificio, mis mejores marcas de 21 y 10k que logré en este proceso, mi tremenda disciplina, mi familia por ahí siguiéndome también, mi Cronianos que también corrían conmigo Londres, los acuerdos verbales hechos con mis amigas de entreno que cuando se me bajará el ánimo las recordará gritándome, no podía bajar los brazos ahí tan tempranamente”.
Repentinamente salió la Croniana luchadora de mi y me grité en voz alta ¡Ahora es Nade! ¡Sal a buscar tu marca! ¡Te quedan 12 kilómetros! El switch fue automático, me proyecté cruzando la meta y ya casi venía saliendo de la isla, la multitud era cada vez más importante, la gente alentando como locos un ruido ambiente de fiesta muy bacan, empecé a leer los carteles, toqué todos los champiñones power que ví, me reí con la creatividad de la gente, disfruté los disfraces, me convencí de que “Pain is just the French Word for Bread”; esto fue lo que paso a paso me transportó al kilómetro 38 donde de sorpresivamente vi a mis compañeros de Cronos. Este grito de aliento fue tan potente que me sopló directo al arco de meta. No paraba de mirar el reloj y pensaba ¡ya lo tengo! ¡ya lo tengo! en realidad siempre lo tuve, siempre supe que Londres me iba a dar este precioso regalo ¡porque era mi momento!
Mis agradecimientos totales a mi Club Cronos siempre presente y entregando muy buenas vibras, a José Camps mi entrenador, a mis amigos y amigas de Running, a la gran familia deportiva que tengo en Chile, a Cristián Sepulveda mi nutricionista y a Fernando Yanjari de KMP ¡Son lo máximo!
Nadège Person
Fecha de la carrera: Domingo 21 de abril de 2024