Testeo New Balance Fresh Foam X 1080 V14

Fue emocionante cuando Runchile me pasó para probar las New Balance Fresh Foam X 1080 V14. Me interesaba entender por qué esta línea de zapatillas tiene tantos fans. No debe ser por casualidad que son el modelo de zapatillas de running más vendido de New Balance. Luego de correr con ellas durante varias semanas pude salir de la duda. Ahora les cuento por qué se han ganado tan buena fama.

Muchos no lo saben, pero New Balance al nombrar esta línea de zapatillas, nos entrega algo de información de lo que debemos esperar de ellas. Aquí va la explicación: El 10 es porque tienen un 10 en amortiguación (es decir, la nota máxima) y el 80 corresponde al código que asigna New Balance para identificar sus zapatillas para pisada neutra. Así es que ya lo sabemos, las 1080 son zapatillas altamente amortiguadas para corredores de pisada neutra.

Estrené las zapatillas para un trote de 16 km a ritmo muy suave, desde un comienzo me encantó como se sentían de cómodas y estables. Las sentía blandas, pero no en exceso, tienen un rebote e impulso controlado. Ese día hacía mucho calor y sin embargo, la transpirabilidad anduvo bastante bien.

Ocurre algo especial con las NB 1080. Cuando se lanzó la versión 13 hubo consenso entre los adeptos en eran la mejor versión de las 1080. Con ellas New Balance había logrado esa sensación de suavidad aparentemente insuperable en la amortiguación y en la transición de la pisada. Leí por ahí que alguien cuestionaba una versión 14 (antes de que fueran lanzadas), diciendo «si funciona bien, entonces no lo repares”. Pero finalmente resultó que las Fresh Foam X1080 V14 fueron ¡aún mejores!, ya que había espacio de mejora en la estabilidad y en la respirabilidad del Upper. El precio de esta mejora fue un aumento en el peso (para talla US 6.5 es de 227 gr.).

Para la capellada, en esta versión, con un nuevo Engineered Mesh, el cuual mejora respecto de la transpirabilidad. Me gusta la composición y estructura del upper, ya que los pies se sienten firmes y resguardados, hay cero desplazamiento o inestabilidad del pie, evitando una sobrecarga en los músculos estabilizadores del tobillo. En mi caso es perfecto que el pie no tenga posibilidad de moverse, pero aquellos corredores que les agrada que el pie quede más libre, pueden probar con media talla más del número habitual.

En la mediasuela está presente el Fresh Foam X. New Balance intenta remarcar la evolución positiva que ha habido a lo largo de los años con el Fresh Foam, incorporando una etiqueta en la plantilla, en que se grafica la progresión en el tiempo. En esta versión el Fresh Foam X es más firme y no tan blando como la versión anterior. Para mí es el acolchado perfecto, pensando en que el uso objetivo de este modelo son los entrenamientos a ritmos cómodos. Tiene un rebote suave, pero totalmente controlado.

En esta ocasión, New Balance hizo ajustes en la geometría. Además de que hubo un aumento de 2 mm en el grosor de la espuma (pasan de 37 a 39mm en el talón y de 31 a 33 mm en antepie, manteniendo un drop de 6 mm), hay una variación en la forma de la base, haciéndola más ancha. Esto se tradujo en una mejora importante en la estabilidad, y también, por supuesto, gracias a la ayuda que entrega el mejor control en el rebote por el Fresh Foam X de esta versión y una estructura firme de la capellada… ¡todo en sincronía!

La suela también con algunas mejoras. Incorporan un caucho más denso en zonas, no sólo de mayor desgaste, sino que además ayudando a una buena tracción.

En conclusión, New Balance Fresh Foam X 1080 V14 se destaca por su comodidad de primer nivel, suave amortiguación y una buena estabilidad. Comprendo qué ven los fanáticos de estas zapatillas. No es fácil encontrar una combinación tan bien lograda de componentes que se traduzcan en las zapatillas ideales para entrenamientos diarios de larga distancia a ritmos cómodos. Tengo 2 maratones planificadas para los próximos meses y sin duda las 1080 V14 seguirán siendo mis aliadas en los entrenamientos.