Testeo del Garmin Forerunner 235

Este modelo tiene la cualidad de tener el pulsómetro en la muñeca, algo que hoy en día las diversas marcas y el mercado exigen. Y es que la banda de pecho presiona, roza y molesta en especial a las mujeres pues provoca juego son sus petos y en muchos casos heridas.

Vamos por partes. El reloj (impermeable capaz de sumergirse a 50mt) es sumamente liviano, de apenas 40 gramos; su esfera con 42mm de diámetro es lo suficientemente grande para ubicar números de 10mm (a prueba de cegatones) y su grosor de 12mm permiten que sea muy funcional para vestir hasta con camisas. La correa es de goma con ojales cada 2mm para dar un ajuste de muñeca, que necesita ser perfecto para que el lector de pulso funcione.

El GPS integrado. Lo probé con dureza de inmediato (prendí, esperé 10 segundos y salí a correr entre edificios) obviamente no agarró señal hasta 6 kilómetros después. La distancia fue calculada por el sensor de cadencia con un error del 10%. Repito la primera vez, recién sacado de la caja.

La segunda vez repetí el mismo esquema, y ahora agarró señal tras 1.5km, y la tercera vez tardó ¡tres segundos! Y es que todo GPS debe adquirir satélites de su área cenital, así cada vez es más sencillo para ellos ubicarlos. Probé su precisión en varios circuitos que tengo medidos con odómetro y el error fue de pírricos 10 metros en tres kilómetros (0,3%), de más está decir que no es significativo, bastaba hacerle el quite a un par de charcos y allí están esos 10 metros extra.

Antes de analizar el pulsómetro aclaro que tengo mala circulación superficial y que en los modelos de otras marcas que he probado con esta característica, el pulso se me perdía. La primera vez mi pulso en un trote suave aparecía por 190 pulsaciones… La segunda vez en un trote de 14km me salió impecable y la tercera que fue un día frio se me perdió el pulso por entre el 2k y el 4km, después ningún problema (comparado con otros modelos en mi caso particular el 235 tuvo un desempeño superior). Para personas como yo de pieles mas morenas y problemas de circulación recomendaría utilizar pulsómetro de banda en el pecho para irse a la segura, el 235 permite acoplar este tipo de aparato sin problemas.

El programa del reloj es súper fácil e intuitivo de utilizar. Consta de un menú troncal que se divide en 5 ramas (Configuración de Actividad, Entrenamiento, Historial, Mis Estadísticas y Configuración). Una vez que ingresamos nuestros datos personales como edad, peso, talla, etc. el reloj calcula las áreas de pulso para trabajar en cinco zonas: Zona 1 Calentamiento; Zona 2 Suave; Zona 3 Aeróbica; Zona 4 Umbral; y Zona 5 Máxima.

Pueden programarse hasta cuatro campos de datos por pantalla (tiempo, distancia, cadencia, tiempo medio, velocidad, etc…) y hay una pantalla que me resultó muy funcional que muestra el pulso y un “tacómetro de cinco colores” con las zonas de entrenamiento: Zona 1 Gris, Zona 2 Azul, Zona 3 Verde, Zona 4 Naranja y Zona 5 Roja. Esto junto con un corazoncito que cambia de color dependiendo de la zona en que me encontraba entrenando. Muy gráfico y fácil de leer.

Otro punto es la batería. Este reloj puede apagarse si lo deseamos. Para probar su autonomía lo dejé encendido junto al Bluetooth en todo momento y me duró poco más de 4 días incluidos dos trotes de 14km y un largo de 21K, y para cargarlo completo nuevamente me tomó unas tres horas.

Este, más que un GPS, es un reloj de fitness que monitorea nuestro pulso en todo momento. Nos indica si hemos estado sentados mucho rato, nos da un estudio de cómo hemos dormido y cuanto tiempo necesitamos para recuperarnos luego de nuestros entrenamientos. Calcula nuestro VO2max estimativo y lo que me dejó boquiabierto: un programa predictivo que proyecta tus tiempos de 5K hasta maratón respecto de tu estado físico y VO2max. A modo de ejemplo en los 10K Brooks donde hice 40:15, el reloj me arrojó una proyección de 40:36, ¡casi me fui de espaldas de la impresión!

Además se programa para acoplarse vía Bluetooth al celular. Para esto hay que instalarle el App Garmin Connect. Garmin Connect es un programa que entrega información muy completa con ritmos de carrera, altimetría, calorías, cadencia, longitud de la zancada, pulso medio, tiempo por vuelta (se puede personalizar, yo utilizo vueltas automáticas de un kilometro), tiempo de trabajo por zonas. Yo siempre me he maneado para este tipo de cuestiones y esta vez me salió tan fácil que estoy empezando encariñarme con el 235. Y es que es fácil encariñarse de un dispositivo que te cuida, te ayuda y hace que saques lo mejor de ti en cada entrenamiento.

Finalmente me referiré al cuenta pasos. En modo reloj, el 235 nos “exige” un mínimo de 10.000 pasos al día para cuidar nuestra salud, y nos muestra cuantos llevamos en tiempo real junto a las calorías utilizadas. Esto es un gran aliciente para cuidar nuestro peso y mantenernos saludables. Este es más que un GPS, es un Sistema de Monitoreo Global que pretende mejorar nuestra calidad de vida, bienestar físico y salud. ¡Cómo no encariñarse!