Prueba mejorar tu resultado: Prueba CAMBIAR

Coaching Deportivo

A raíz de los resultados de las elecciones en Estados Unidos con Trump como presidente se me ocurrió escribir sobre los cambios que tenemos que hacer cuando nos vemos enfrentados a decisiones que tomamos, elegimos y también cuando las condiciones del medio nos obligan a girar la dirección.

En el caso de Estados Unidos y su presidente es algo más complejo, ya que implica muchos cambios sociales, políticos y de otros ámbitos, generando revuelo y mucho miedo en el ambiente, lo que es natural en estos procesos.

Pero para aterrizar este tema tanto al triatlón como en el running, el primer gran cambio que nos toca hacer es cuando decidimos dar el paso a convertirnos en triatletas y corredores. Esa decisión conlleva alteraciones que no son menores, en la que hay que tomar conciencia de que golpearán nuestras rutinas, tiempos libres, amigos, familias, señoras, hijos, alimentación y una buena dosis de esfuerzo y motivación para lograrlo. Valientes desde un principio en afrontarlos, porque siempre ante cualquier cambio existe un riesgo que correr y en el que siempre tendremos algo que perder. Es por esto que es tan importante en este proceso inicial ser comunicativo con el entorno, integrar a tus cercanos, tener claras tus metas y preguntarte: ¿Qué quiero? ¿Por qué lo quiero?, ¿Para qué? ¿Cómo? Y por último ¿Con qué de mi?, con mi garra y empuje por ejemplo o con mi talento y motivación.

Y luego, igual que en todos los procesos de aprendizajes, cuando sentimos que hemos ido creciendo, entrenando, compitiendo, obteniendo más destrezas y experiencias vamos creando una «Zona de Confort» que nos resulta agradable, confiable, donde todo se va dando bien: el equipo, el entrenador, los tiempos, los resultados, etc. Y esto está perfecto si es lo que buscabas y te sientes feliz sin incomodidades.

En otros deportistas pueden empezar a aparecer ansiedades, molestias por expectativas no logradas, frustración por no avanzar o estar estancado, desaliento, comportamientos obsesivos al querer controlar todas las variables, inestabilidades de humor, relaciones más difíciles, etc. Si no te haces cargo y tampoco las reconoces puedes sentirte amenazado, miedoso de perder lo ganado, compararte con otros, depender de la opinión del resto, o a la inversa, si miras lo que sucede, puedes “re” plantearte nuevamente un cambio.

También un cambio puede llegar de un momento a otro con una lesión no esperada, donde tendrás dos caminos: hundirte en depresión y gastar mucha energía al resistirte o buscar alternativas, soluciones, variando tu disposición en el presente y hacia tu futuro.

Volver a motivarse para salir de lo mismo, cambiar a veces con cosas tan simples como soltar el tiempo en una carrera lo que te muestra la gran satisfacción de correr a sensación, mayor libertad. Cambiar la actitud, el enfoque, pasar de ser un pesimista donde todo lo encuentras difícil y atreverte con algo nuevo, ser optimista con el futuro hace diferencias.

Dependiendo de tus objetivos puedes cambiar a correr cerros, porque así mejoras velocidad disfrutando del paisaje, agregar en la medida que puedas un descanso o cariño hacia ti (masajes). Quizás en casos más extremos cambiarte de club porque no te sientes a gusto con tan poca o mucha exigencia. Correr los domingos para tener el sábado para tu familia.

Ahora que estás cerca de desafíos importantes es el minuto para pensar en hacer cambios que aunque pequeños puedan darte nuevas posibilidades, sin dejar de ser responsable y consiente en tus objetivos.

Visualiza el beneficio de hacerlo y recuerda; que están las personas que esperan a que se produzcan los cambios y los que hacen porque el cambio se produzca en ellos. Sin miedo, dispuesto a vivenciar nuevas rutas, a mejorar, encontrar placer, traspasar estructuras que te amarren tomando hoy “acción”.

El jueves 15 de diciembre se realizará una charla de coaching deportivo con cupos gratuitos y limitados. Más información en la imagen de abajo.