Mauricio Sánchez: “El 2017 buscaré el podio de mi categoría en Boston”Mauricio Sánchez

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Siguiendo con las entrevistas a los mejores chilenos en los Majors 2015, la semana pasada estuvimos con Mauricio Sánchez, quien fue el mejor chileno en el Maratón de Boston 2015, al cruzar la meta en 2:43:13.

Mauricio se considera un atleta amateur de muy buen rendimiento y entusiasta por el running. Antes era triatleta y ahora convertido en un maratonista. Tiene 43 años, con una familia deportista, donde su hermana es montañista y escaladora, su hermano triatleta y con dos sobrinos incentivados con el deporte.

Cuando le preguntamos a qué se dedica nos contó que siempre dice que tiene 3 trabajos: El primero es correr a las 6 y media de la mañana, el segundo es ser gerente de finanzas de ASA Constructora donde trabaja con su hermano, y el tercero es ser entrenador del team KM 42.

A continuación la entrevista…

¿Cuáles fueron tus comienzos en el deporte de alto rendimiento?

Pasé por muchos deportes pero comencé el año 89, hace 26 años atrás, en el equipo de triatlón de la Universidad Católica que dirigía Martín Arias. En ese momento se formó un equipo muy competitivo y de alto rendimiento bautizado como “la patrulla juvenil”, donde estaban Matías Brain, Rubén Arias y otros jóvenes entre 16 y 19 años con muchas ganas de hacer cosas grandes. Muchos siguieron enfocados y otros se dedicaron a sus vidas profesionales. El que se dedicó finalmente fue Matías que llegó a los Juegos Olímpicos de Sydney 2000.

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Patrulla juvenil

¿Cuándo te pica el bichito del running?

Siempre he sido bueno para correr y dentro de las disciplinas del triatlón, el trote era unas de las armas que tenía, porque remataba muy fuerte. Pero al salir del tri en el año 97, seguí corriendo pero haciendo otras actividades. Retomé el correr cuando supe que Martín había dejado la Católica para formar el TYM Running. Eso hace 10 años atrás. Entendiendo que el proceso de comenzar con un grupo nuevo iba a ser complejo y también asumiendo que yo podía ayudar en armar un grupo de punta para darle tiraje. Inmediatamente me di cuenta que me seguía gustando la competencia. Pero debo reconocer que no me tincaba tanto la idea de correr maratones.

¿Y cuándo hiciste click con el maratón?

Cuando fui al primer maratón de Otawa, Canadá, el 2006 donde registré 2h53m. Pero en esa oportunidad quedé picado porque miraba mi tiempo a huevo, porque me dije que a tal ritmo corro la distancia que sea, pero después del kilómetro 30 comencé a sentir cosas que antes no había vivido y perdí un poco el control porque no estaba tan bien preparado, y pensaba que no podía ser que esta cuestión me la ganara. Quedé picado.

Ahora la aventura de correr un maratón ha generado mi adicción. Porque puedo correr muy preparado, pero el maratón en sí siempre tiene alguna sorpresa. Siempre. Porque en general siempre vas a tope y no sabes si te van las piernas hasta el km 38 o hasta el km 39. Esa inquietud la tienes hasta que pasas el umbral de los 30 kilómetros y cada kilómetro después es un regalo porque golpea fuerte.

¿Y en los maratones que vinieron después, comenzaste a mejorar tus tiempos?

Comenzaron a mejorar desde mi primera Maratón de Santiago (o segunda, no recuerdo bien), donde en la organización del evento estuvo la mezcla de Adidas con Olimpo Producciones, que partió desde el Parque Araucano. Ahí hice 2h40m. Y luego, en la siguiente de Santiago hice 2h39m, tiempo que superé por 5 segundos en el Maratón Costa Pacífico en el año 2010. Siempre con carreras que tienen desniveles. Pero más allá de eso, creo que todos los maratones son difíciles.

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¿Corriste Boston por primera vez con 40 años ¿Por qué después de tanto tiempo?

Básicamente porque tuve algunas empresas que me demandaron mucho tiempo y pensar en un viaje no estaba en mis planes. Fue por un tema logístico más que nada no correr Boston antes, pero durante el 2015 se dieron todas las condiciones para que lo hiciera y lo aproveché.

¿Y con qué objetivos corriste el Major de Boston?

El primero era lograr mi récord, bajar de 2h39, así que tenía proyectado y entrenado correr en 2h38. Pero en esa carrera el clima te puede jugar a favor o en contra porque su circuito está trazado desde un punto a otro, y si te toca viento a favor puedes hacer un récord pero en mi caso el viento fue en contra y más encima con lluvia. Siempre se ha dicho que lo que cuesta es lo que perdura, por lo que tengo ganas de volver el 2017.

Pero igual registraste un tiempo de 2h43m y fuiste el mejor chileno en Boston. ¿Te dio satisfacción ser el primero de los nacionales o te pesó más no lograr tu marca?

La verdad es que siempre uno va con más de un objetivo. Y obviamente el primero para mí era conseguir mi récord de 2h38, porque como te lo comentaba antes, fui con un plan de entrenamiento hecho para eso. Pero la verdad es que desde la partida asumí que ese objetivo debía postergarlo y cambié de objetivo. Las condiciones del tiempo fueron muy duras y decidí, entonces, lograr mi objetivo número dos que era mejorar mi tiempo, aunque fuera un segundo. Y traté de aguantar para lograrlo hasta el km 38, el que lo sentí y terminé muriendo a sólo 4 kilómetros de la meta.

Entonces puse en marcha mi tercer objetivo, que a veces uno lo explicita y a veces no, pero yo no fui a la carrera pensando ser el mejor chileno, pero era el objetivo que me quedaba. Hubo varios compatriotas muy buenos en la carrera, donde 16 de ellos bajaron las tres horas. Entre ellos (José Tomás) Ruiz Tagle que tiene mejor tiempo que yo, Gerardo Valle siempre está ahí entre 2h43m o 2h44m y te da el zarpazo, a Álvaro Montoya no lo conocía hasta ese momento, pero a todos ellos me los encontré en la ruta. Los fui pillando desde el km 8, a Ruiz Tagle y Valle, donde este último conoce mi forma de correr. Y me enteré cuando pasé a Álvaro Montoya  que sería el mejor chileno porque no había nadie más (Tiempos de Boston AQUÍ).

¿Y cuál es la sensación de conseguir ser el mejor tiempo de los chilenos en Boston?

La verdad es que ese objetivo lo disfruté después de llegar a meta porque antes, en los kilómetros finales lo pasé pésimo, iba muy fatigado, con ganas de que terminara luego, porque no lo estaba pasando bien, hacía mucho frío y lo pasé muy mal en la parte final, ya que sabía que estaba perdiendo tiempo porque me pasaban otros corredores. Los últimos kilómetro los corrí por lo menos unos 30 segundos más despacio de los demás.

Pero al rato, cuando comimos algo con mi familia, supe que no había sido un mal resultado y a valorar el tiempo. Y además disfruté que fui el más rápido con tremendos rivales. Pero no quedé picado, sino contento, por eso en el 2017 voy a buscar la categoría con un mejor entrenamiento para lograr el podio, no el primer lugar, porque está muy disparado con 2h25m, pero el segundo y el tercero son abordables con 2h30m y algo.

¿Quién te entrena?

Martín Arias.

¿Cómo se da que el entrenador de un club entrene a un entrenador de otro club?

Es simple y es una recomendación para cualquiera que sea entrenador y a la vez sea atleta. Tú no te puedes auto entrenar, porque pierdes la objetividad cuando eres atleta. Uno necesita que otra persona piense y planifique por ti. Auto entrenarse creo que no es lo adecuado. Y nunca me he entrenado sólo, pero reconozco que podría ser un tema. Además teniendo la ventaja que con Martín nos conocemos hace 27 años y donde respetuosamente cada uno aporta con este objetivo en común.

La relación que mantenemos con Martín es de mutuo respeto y nos permite conversar, cuando ocurren disonancias, y llegamos a acuerdos donde quedamos satisfechos ambos, donde yo paso a ejecutar como atleta ese acuerdo, siendo disciplinado y obediente.

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¿Cómo se compone tu club KM42?

El objetivo va hacia el maratón, pero entrenamos también para distancias de 21 y 10 km. El espíritu del club es entrenar atletas amateurs de alto rendimiento. O sea, nosotros buscamos el mejor rendimiento de cada persona como misión del club. Y me he topado con gratas sorpresas, que hay más talento de lo que uno cree. O sea todo el mundo tiene talento y trabajamos para sacarlos a flote. No queremos que sean los primeros de una carrera, sino que el que entrena con nosotros sea lo mejor que pueda ser como atleta.

El club tiene un pool de especialistas, un convenio con Clínica Meds para hacer test biomecánicos y de consumo de oxígeno que ayudan a optimizar el entrenamiento. Este convenio apunta a lo que te decía, a que el atleta amateur logre su mejor rendimiento optimizando su tiempo, gracias a una gama de especialistas, que lo ayudan no sólo en su rendimiento, sino que también en su salud, para que adopte un estilo de vida saludable.

Actualmente son 35 personas las que entrenan, entre 26 hasta 48 años. Y las formas de contactarse con nosotros es a través de Twitter en @KM42STORE o al mail km42club@gmail.com. Entrenamos los lunes, miércoles y viernes en el Parque Bicentenario a las 18:30 horas, y los sábados reunimos a los dos equipos,TYM y KM42 y se hace el largo juntos en Santa María de Manquehue a las 8:30 de la mañana.

¿Cómo lo hace una persona de 43 años con trabajo, que entrena a club y corre un maratón en 2h40 y busca mejorar ese registro?

Para el caso de los amateur el factor edad no es tan relevante. Hay obviamente un deterioro fisiológico que se puede compensar, en parte, con un buen entrenamiento. Por ende, no hay que ponerse las barreras de los años, porque las marcas se pueden mejorar. Y eso depende básicamente del tiempo que le puedas dedicar al entrenamiento.

¿Cuánto entrenas?

La marca de Boston la hicimos con Martín, con un promedio de 80 km semanales. Y repetir el mismo esquema no me ha funcionado, por lo que incrementamos el volumen y aplicamos fortalecimiento, que me ayuda a recuperar y mejorar parte de mi masa muscular, ya que al existir un aumento de volumen hay que preparar al cuerpo para que lo aguante, y finalmente el trabajo de fuerza ayuda en la biomecánica de la carrera.

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¿Y cuando corres, disfrutas la carrera o vas a tope?

Generalmente voy a tope, donde da lo mismo el entorno en el que vaya.

¿Cuáles son tus próximos objetivos?

El Maratón de Santiago donde quiero hacer mi récord. Después Berlín, donde quiero ratificar mi marca de Santiago.

¿Cómo convencerías a alguien para que se anime a correr?

Correr es bastante árido al comienzo. Hay que enamorarse del correr. La mejor forma para que la persona tenga una disciplina y sea constante, es que antes que se ponga una zapatilla, fije un objetivo desafiante. Ponga al tiro un objetivo que lo mueva, no importa si es a un año o dos, pero es importante que defina un objetivo antes de amarrarse las zapatillas, y que esté convencido que lo quiere lograr. Al tenerlo claro, sólo basta que se ponga a trabajar en pos de ese fin, y cuando las cosas se pongan difíciles que piense que es el objetivo lo que quiere. Porque si lo tiene en mente, va a poder lograr lo que se proponga. Posteriormente le va a tomar el gusto a correr y le va a encantar. Pero para partir, debe tener un objetivo claro que quiera cumplir. Y eso lo aplico en mi club.

¿Cómo definirías el maratón?

Es una prueba de espíritu, pero también de mucha incógnita, porque sabes como partes, pero no sabes como vas a terminar. Todos los maratones son difíciles y no por su topografía, sino porque son 42 kilómetros. Y como uno nunca entrena más allá de 30 ó 32 kilómetros, uno no sabe como va a reaccionar tu cuerpo en los últimos kilómetros.

Ahora, al que le gusta la competencia, puede mutar en otros deportes. Pero al que le gusta el fondo, la adicción es el esfuerzo y el tiempo. Por eso al que le gusta el maratón también le puede gustar un triatlón.

¿Te atraen los Majors o cualquier maratón?

Lo interesante del Major es que es más competitivo y lo vuelve más atractivo, porque en otras carreras uno termina corriendo solo. En las carreras más pequeñas uno tiende a ser más conservador y dar lo mejor al último.

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¿Te volveremos a entrevistar como el mejor chileno de un Major?

Ojalá, pero uno nunca sabe quien va a competir.

¿A quién admiras?

Hay varios, muchos, pero admiro a los amateurs de alto rendimiento. A mis alumnos por ejemplo, porque tienen que compatibilizar tantas cosas y aún así son metódicos en el entrenamiento. Ahora también admiro a muchos atletas de alto nivel que han superado sus registros. Los mayores de 40 hacen lo que te digo: Tratan de romper la barrera de la edad. Porque cuando ya tienes experiencia, esta es muy valiosa para que puedas aún ganar carreras y eso es admirable. Por eso admiro a los que siguen corriendo, más que a los que logran una gran marca y desaparecen. Yo admiro al que le gusta correr y sigue siendo competitivo.

Gracias Mauricio por tu tiempo y te deseamos mucho éxito en tus proyectos.

Entrevista realizada en diciembre de 2015

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