Lucita y Diego: Los ganadores del 3er Climbing Tour 2013

En marzo pasado, en Santa Martina fue nuestra primera experiencia en el Climbing Tour. Enterados por la gran publicidad de este evento, nos inscribimos los dos para disfrutar de un panorama deportivo como parte de nuestro entrenamiento para complementar el triatlón. Llegamos ese día con más amigos a conocer como sería esto y la verdad fue increíble. Cientos de personas con sonrisa de oreja a oreja, todos animados y compartiendo la experiencia del deporte outdoor, vida sana y espíritu de superación. Esta vez, corrimos juntos hasta la meta (por supuesto Diego era el que me acompañaba a mi) y la idea era gozar cada momento de la carrera. El paisaje increíble, sólo rodeados del ruido de pájaros, el silencio de la montaña y los pasos de los corredores del lado. Grandes subidas que nos retaban y a la vez nos llenaban de adrenalina para superarlas y seguir adelante. Luego, al llegar arriba, nos dimos cuenta del buen resultado obtenido y decidimos seguir corriendo las próximas fechas del calendario.

Ahora, con distintos objetivos (más competitivos esta vez), nos inscribimos en la tercera fecha que sería en Hacienda Chacabuco.

Día de la carrera

7:55 am

En la cocina tomando desayuno, nos reunimos un grupo con destino a la Hacienda de Chacabuco, tercera fecha Climbing Tour. Llegamos imposible más entusiasmados, con curiosidad de este nuevo circuito (eso es lo más entretenido, nunca se sabe con que tipo de camino uno se va a encontrar). Al bajarnos, nos encontramos con un paisaje increíble, un amplio sector donde estaba el campamento base con música puesta y un escenario alrededor del que todos ya calentaban saltando y moviéndose. Hidratación tampoco faltaba, había PowerAde para cada competidor que quisiera! Colchonetas para elongar, barritas de cereal, fruta, guarda ropía, carpas de La Preferida, que nos esperarían con hamburguesas para el retorno, así como Lucchetti con sus tallarines.

10:15 am

Todos formados en la partida, por suerte pudimos meternos en primera linea, para así poder salir y tomar posiciones lo antes posible. Cada uno tenía su propio objetivo para este día.

Lucita:

En la partida estaba con más ganas que nunca! Soy una fanática del deporte y cada vez me gusta más. Dentro del triatlón disfruto cada entrenamiento, pero mi preferido es el cerro, por eso esta carrera me la esperaba con mucho entusiasmo! Cuenta regresiva y partimos… Llena de energía salí corriendo y al rato pensé “tranquila Lucita que hay que llegar arriba con fuerza”, así fue como cambié el switch y pensaba… “qué suerte estar aquí corriendo y sintiéndome tan bien”, disfrutaba cada paso y miraba hacia adelante. Al poco rato vi que estaba segunda, Lorena Campos, gran corredora iba adelante, pero yo tenía muy buenas sensaciones y sabía que esta vez podía más. Continué muy segura a mi ritmo y cada vez que el cerro se ponía más parado pasaba a mucha gente por el lado. Las subidas me llenan de energía, hecho que me hace ser una fanática de los Climbing Tour. Terminando la primera subida fuerte, me encontré primera, pero luego Lorena volvió a pasar lo que hizo la carrera más entretenida. Ya llevábamos 5.5 km cuando empezó otra subida fuerte y más larga de lo que estaba enterada. “Se viene lo bueno pensé”, muy tranquila y sin nunca dejar de disfrutar cada paso, gozar del increíble lugar por el que corríamos le comencé a poner más fuerza a esta carrera, lo que me llevó a llegar a la punta del cerro muy fuerte, contenta y en el primer lugar de las mujeres. Recibida con un abrazo de Diego y el apoyo de mis compañeros UC.

Diego:

La verdad es que soy un fanático de las sensaciones de fatiga cardíaca, esa sensación de que el corazón está a punto de explotar, es mi preferida (que sensación más rica, parece raro, pero así es) y el cerro por lo general entrega mucho de lo anterior. Había ido a la primera fecha del tour en Santa Martina y me gustó muchísimo, durísimo, hay puntos en que las piernas no dan más por lo parado del circuito. Despues de esa primera fecha me mantuve corriendo bastante constante, subiendo los volumenes y las intensidades de manera progresiva, hasta el punto de que una semana antes de esta fecha me sentía realmente livianito, me sentía corriendo muy bien.

Ya en la carrera, me propuse partir a un ritmo moderado (es muy importante guardar energías para las subidas y el final) y mantenerme pegadito a los que sabía que eran muy fuertes subiendo, con la idea de que no se me despegaran. Hasta el km 2 todo iba como avión, hasta que por ir tan pegado a un corredor me tropecé y caí, pero por suerte atrás mío venía Javier Abarca y Patito Molina que me ayudaron a pararme rápidamente (gracias por esperar Patito y Javier, es una gran demostración de valor que existe en el running). Pasaban los kms y cada vez me daba cuenta de que estaba más cerca de la punta y la cuchara estaba respondiendo de buena manera, además del súper pasito que estaba usando en las subidas (pasitos muy cortos y con arta frrecuencia y nunca parar). Cuando ya quedaban cerca de 600 metros, me di cuenta que estaba segundo y tenía al primero a pocos pasos, era la oportunidad, entonces me armé de fuerza (porque poca me quedaba) y cuando quedaban cerca de 30 metros a la meta logré pasar al primer puesto, no lo podia creer, todo el entrenamiento había dado fruto. Ya arriba, nos abrazamos con todos los que iban llegando (se hace muy buen ambiente en este formato, ya que cada uno busca sus objetivos y todos quedan contentos al llegar arriba). Pero lo más emocionante, fue cuando llego la Lucita, venía primera y cruzó primera. Entonces corrí, la abracé y le dije “ganamos los dos, cacha lo emocionante jaja”. Despues vino el relajo con todos los demas corredores, todos contentos y muy buen ambiente. Dejarle muchas gracias a todos los que hacen esto posible (familia, organizadores, amigos, etc.) y darle muchas felicitaciones a todos.

Arriba el ambiente era increíble, todos contentos e impresionados del paisaje. Felicitaciones y ánimos van y vienen para todos por estar ahí, es lo máximo ver a cada persona superándose a sí misma y pasándolo tan bien de una forma tan sana y espectacularmente bonita. Una vez que nos reunimos todo el grupo arriba y nos sacamos varias fotos, bajamos muertos de la risa y conversando contando cada experiencia. Ya en el campamento base nos comimos las esperadas hamburguesas para reponernos de los casi 14 km que recorrimos en total. Muy agradecidos de los grandes premios que recibimos por los lugares nos fuimos a la casa con muchas ganas del próximo Climbing Tour.