Todos quienes corren –sin excepción- han debido iniciar un proceso, desde largas caminatas, trotes suaves, trotes más largos y finalmente se entusiasman con el desafío de inscribirse en una carrera. Cada carrera entrega un estímulo, el que varía de acuerdo al presupuesto y tamaño de la competencia. Pero son estos estímulos los que materializan aquella sensación de logro al completarlas y hacen que crezca el apetito runner, sin darse cuenta uno ya mordió el anzuelo y se enamoró del running.
• Medalla: Es uno de los más requeridos y queridos por los atletas que se inician en esto del running. Refuerzo muy importante en la sensación de logro, ya que lo materializa. Esto ayuda a seguir motivados para preparar otra carrera y así persistir en el running. Los más entusiastas siempre son los hijos(as), pues para ellos el papá o mamá ganó. Y la verdad es que todos ganamos al cruzar la meta.
• Polera: Hoy por hoy es casi obligado para toda carrera entregar una polera para quienes compiten. Hay unas más especiales como las de “finisher” para quienes han terminado una maratón o triatlón sea un Ironman o Medio Ironman (como Pucón). Son motivo de orgullo y se pueden lucir en los entrenamientos o en los eventos deportivos que los rodean (ferias, tallarinatas, etc.).
• Copa: generalmente sólo para elegidos, los top 3 por categoría. Aunque hay maratones como Rosario donde entregan 40 copas por categoría.
• Diploma: Muchas carreras en Europa y Norteamérica te envían un diploma con tu nombre, tiempo y lugar de la carrera. Lo puedes enmarcar y poner en tu casa u oficina.
• Dorsal: He visto varios corredores que los coleccionan e incluso enmarcan los más significativos. Hay de variados diseños y en maratones como la de Disney World vienen personalizados con tu nombre, como lo hacen con los elites. Hay unos muy especiales como los del Maratón de Boston donde tu número de dorsal es el ranking de clasificación con la marca que accediste a la carrera. Así, por ejemplo, si tienes el número 6820 y llegas delante de un atleta con el 4500, le ganaste a un tipo mucho más rápido que tú.
• Foto meta: En variadas maratones y triatlones una foto vale más que mil medallas. Esa imagen lo resume todo, congela el instante preciso que te cambió la vida, ¡te has convertido en maratonista o Ironman! Muchas carreras contratan empresas para la cobertura fotográfica, por las que luego uno debe pagar no despreciables sumas de dinero. Pero si corriste tu primera maratón no te puedes resistir a comprar esa foto de uno de aquellos momentos inolvidables de tu vida. Más aún cuando la puedes compartir con todos tus amigos vía Facebook, Instagram o Twitter.
Con el correr de los años, cada corredor tiene su estímulo favorito. Para algunos las medallas pasan a un segundo plano y sólo buscan mejorar sus marcas. Para otros , la foto en la llegada o disfrutar de la experiencia basta. Pero lo lindo es que hay estímulos para todos los gustos.
por Adrián Rodríguez (Martes 29 de abril de 2014)