Volver a correr
Testeo Asics Novablast
Durante los meses de cuarentena me alejé del running y poco hice de PF, por lo que en septiembre cuando quise volver a correr, la balanza y el cuerpo me dijeron ¡stop!
En ese momento tuve que planificar el retorno, comenzando con trotes muy suaves y caminatas, hasta que unos días después pude comenzar a trotar. En ese momento me encontré con el gran maratonista olímpico Daniel Estrada en la nueva tienda Asics, quien me habló maravillas de las nueva Asics Novablast. Luego de la recomendación, no quedaba otra que probarlas, así que Asics se portó un 7 y me pasó un par para que vuelva a correr.
La primera impresión fue la mejor, unas zapatillas muy livianas, con gran amortiguación y muy flexibles. Inclusive le dije a Daniel que no parecían Asics. Me dijo: “no te vas a arrepentir”.
Así que me las llevé y ese día comencé a probarlas. Desde ese día las dejé en la puerta y son las preferidas para cualquier tipo de trote. Recuerden que todavía estoy en proceso de vuelta a las competencias. Pero con las nuevas Asics Novablast la motivación llegó con todo.
De las características técnicas puedo comentarles que tienen un drop de 10 mm y un peso de 300 gramos en mi talla que es 12 US.
La entresuela está fabricada con FLYTEFOAM Blast ™, el nuevo compuesto de la marca nipona, que permite además de una amortiguación espectacular y una gran reacción en cada zancada. Además, el caucho AHARPLUS ™ en la suela tiene el triple de resistencia a la abrasión que la suela tradicional anterior, por lo que la durabilidad será mucho mayor.
La he probado en trotes suaves (la mayoría), pero también a ritmos cercanos a 5 minutos el kilómetro y también en pasada cercanas a 4 el mil. Quiero aclarar que no soy un corredor liviano, ni siquiera cuando estoy en forma, que peso 80-83 kilos, pero el problema que ahora superaba los 90 kg. Por suerte ya bajé esa barrera.
Las zapatillas se comportaron perfecto para mi peso y por lo que he podido apreciar también lo harán cuando llegue a mi peso ideal. Las uso en todos los entrenamientos y si tuviera una competencia ahora, también serían mi elección, aunque seguro que cuando mi peso y mi preparación mejore me anime con una con placa de carbono, como las Metaracer. Pero por ahora las Novablast son las zapatillas más versátiles que he probado.
La amortiguación que tienen permiten terminar los trotes sin molestias (sobre todo aquellos con kilos demás), pero con sus compuestos no solo absorben el impacto, sino que tienen muy buena reacción para continuar con las zancadas. Inclusive la sensación es que la zapatilla te obliga a tirarte un poco para adelante, lo que mejora la postura para correr.
Las superficies recomendadas con asfalto, tierra compacta y maicillo, aunque si te tocan intervalos en tierra suelta tal vez te falte un poco de tracción. Pero a ritmos constantes ningún problema.
La respirabilidad no es un tema fundamental para mí, pero en ningún momento sufrí del calor en los pies, a pesar de correr varias veces sobre 30ºC.
Los cordones simplemente espectaculares, no se deslizan absolutamente nada. Y además acompañan la estética de las zapatillas y el tema que me toco: Tokyo. Así que como si fuera poco hacen honor a los Juegos Olímpicos de Tokyo. ¿Alguna motivación más?
Tal vez el único punto bajo que le encuentro es cuando quieres hacer retornos en 180º o en 90º en velocidad, ya que al no tener gran estabilidad, se pierde un poco el control.
Definitivamente son zapatillas para corredores neutros, ya que los pronadores seguramente les falte el refuerzo típico de sus zapatillas. Así que ese grupo de corredores deberá esperar por un modelo para ellos. Si sale no esperen un minuto y vayan por el suyo.
En síntesis, una zapatilla extremadamente versátil, con gran amortiguación y retorno de energía, para todo tipo de trote y ritmos.
¿Qué distancia correría con estas zapatillas? Fácil respuesta… ¡por ahora todas! Aunque tal vez cuando esté mas preparado me incline por una Metaracer para competir.
Puedes conseguir estas nuevas Asics Novablast en la primera tienda ASICS en Parque Arauco a un precio de $129,990.
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por Folo (Jueves 3 de diciembre de 2020).